viernes, 1 de junio de 2007

Reclamo de agua potable para Alto Calilegua



















“Nos sentimos abandonados”dice Doña Celestina.

“El canal que trae el agua hasta la pequeña cisterna hace mucho que no se limpia y mire qué sucia esta, tiene mucho barro; nos sentimos abandonados por las autoridades”, dice Doña Celestina Quispe, moradora de la comunidad de Alto Calilegua, quien participó activamente en la Tercera Minga Cultural realizada el 24 de abril en aquella localidad del Departamento Valle Grande.
FRENTE A LO MÁS URGENTE PARA ALTO CALILEGUA: proponemos la conformación de una cooperativa de trabajo local para articular posibles soluciones a éstas y otras problemáticas.
El acceso al vital elemento como recurso natural es de urgente necesidad para la distante comunidad, como primer paso hacia el desarrollo integral, teniendo en cuenta la salud como un derecho de todos. Por eso la importancia que tiene este pedido a las autoridades correspondientes para que se de curso a las mejoras previstas en el precario sistema de provisión de agua en Alto Calilegua.
“Hace dos años y quizás más que no se limpia. Aunque el río pasa no muy lejos de aquí, para nosotros que ya no podemos caminar se nos hace difícil ir a traer agua. Pero los chicos no entienden eso y toman agua de la red en estas condiciones. Hasta bichos se encontraron en la cisterna”, aseguró doña Celestina..
Cabe recordar que en el proyecto de Promoción de la Minga se busca promover jornadas de trabajos comunitarios, con talleres que emplean la metodología de la educación popular y se busca realizar en forma conjunta trabajos comunitarios. La población local colabora con la mano de obra y algunas herramientas que se necesitan; el Centro Cultural Jorge Cafrune de Valle Grande con los materiales más urgentes para llevar adelante una jornada de trabajo.
Se necesita mucho más que una minga para brindar las respuestas a la problemática más urgente de éstas comunidades. Por eso se reitera el urgente llamado a las autoridades provinciales responsables de la provisión de “agua” y de potabilizar el vital elemento en la localidad.
Durante el taller de capacitación, los participantes recordaron momentos históricos en los que las mingas eran la expresión más antigua y representaba una auténtica ayuda comunitaria. Hoy, se espera conservar esa costumbre que todavía se practica en la comunidad, pero que ya no suma adherentes a la respuesta solidaria tradicional.

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